A dos pasos del castillo de Fougères, La Broustal, madre e hijo, es una crepería familiar que pone en valor a los productores locales a través de recetas originales y auténticas. En La Broustal, todo es casero, local y los productos son de temporada. Las tortitas de trigo sarraceno y las Las crepes se elaboran al momento y son 100 % bretonas. La galette de salchicha rougail con su rougail casero es una de las recetas emblemáticas del establecimiento.
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